domingo, 30 de agosto de 2015

Déjame que te cuente que me gusta caminar sin rumbo, perderme,
perderme y encontrarme luego, 
que no creo en los finales felices ni en los amores eternos, 
que soy más de hoy por si quieres quererme.
Déjame que te cuente que soy loca, sentimental y obstinada 

que me gustan más los besos improvisados que los planes del mañana.
Déjame que te cuente todo de mi

de ti puedes no decir nada si quieres 
pero en este momento déjame sólo contarte
los lunares por ejemplo, después. . .

después ya veremos.



8 comentarios:

Aquamarine dijo...

Una honestidad que atrapa y una manera de vivir comprometida con el presente, un combo interesante si me preguntan jiji

Quería pasar a saludarte Coeli!

Te dejo abrazos en esta noche de frío imperdonable!

Olga i Carles (http://bellesaharmonia.blogspot.com dijo...

Fidelidad y Sinceridad.

Un Abrazo.

Dani.. dijo...

Es hermoso!!!

Te envío mi abrazo.
Dani..

Coeli L. dijo...

Que gusto leerte de nuevo Aquamarine! es cierto el presente es la única e infinita constante, gracias por pasar y regalarme una sonrisa.

Un abrazo de Luna

Coeli L. dijo...

Gracias Olga, es un gusto tenerte aquí, es el ideal que siempre buscamos, algo de sinceridad en este acelerado universo.

Un abrazo azul

Coeli L. dijo...

Dani como siempre gracias por estar
un gran abrazo... desde esta Luna.

Lunna dijo...

Paso a desearte Felices Días.

Felices Días.


Llegan días muy especiales, las cosas no volverán a ser las mismas:

¿o tal vez sí?

Estas fechas nos cambian, rejuvenece la memoria y con la barra de carmín rojo pasión nos dibujamos una sonrisa que demasiadas veces esconde el invierno del alma. Nos vestimos con el satén que desborda la noche intentando ocultar que somos un lienzo donde las heridas no siempre restañan la sincera entrega de la confianza, la insinuante mirada del alba, todo aquello que da vida a los sentimientos.

Se marchan días y llegan otros prometiéndonos sueños y como siempre pondremos de nuestra parte el coraje, el compromiso, la seducción para que esa sonrisa bordada en rojo no tenga fecha de caducidad, pero no dependerá solo de nosotros encontrar la respuesta a una caricia, no dependerá solo de nosotros escribir un te quiero sobre la piel desnuda de la luna.

Os deseo, de corazón, que vuestras sonrisas, que vuestros sentimientos, en los días que llegan no conozcan el invierno del alma.

Besos.

Lunna.

Elizabeth Gallegos León dijo...

Saludos, me quedo leyendo

Liz